17 octubre 2005

Me pregunto


¿Por qué escribo? ¿para quién? ¿qué escribo?

Después de cavilar un rato sobre estas tres simples preguntas se me presentó con claridad la respuesta.
No había que buscarle la quinta pata al gato, escribo porque me gusta expresarme así sea en un monólogo frente al espejo o tecleando pensamientos. Porque sé (y confío) que éstas letras serán leídas un día por mis hijas, que a través de ellas me conocerán un poco mejor.
Porque hay cosas, sentimientos que tal vez nunca se conversan pero que ahí están o sucedieron y que si no las contamos por re o por fa, las estoy escribiendo para no olvidarlas.
Una vez alguien a quien leía acabó con su blog, lo cerró, lo desapareció y eso me causó una sensación de pérdida rarísima y hasta me resultaba casi incomprensible como ese alguien quería eliminar sus emociones plasmadas en letras, porque esta persona escribía sus sentimientos, sus pensamientos. Yo creo que no soy capaz y además no quiero desaparacer éstas frases, existen como existen mis acciones, mis pensamientos.
¿Que de repente otros no nos captan? es muy posible. Cuando le escribes a tu corazón, solo te entiende él.
Me encantará, dentro de quien sabe cuantos años, releerme, redescubrirme, burlarle quizá de mi misma o volver a secar una lágrima escapada al recordar algún episodio de mi vida.
Aunque suene petulante éste journal es un legado a mi descendencia, va sin condimento, solo aderezado con mi alma.
Abur.-
PD a mi misma: recordar escribir más seguido

4 comentarios:

Mire dijo...

LINDISIMO!!!!!

Topocho dijo...

Ahora que lo mencionas, una cosa que NO hago es leerme... Me dejaste "fly".

Carlos dijo...

Yo siempre digo que un blog es como un hijo.

Yo no abanderaría un hijo por nada. Tal vez cuando crezca lo ponga algo menos de atención.

El que abandona un blog, después e haber plasmado en el sus vivencias y emociones, es capaz de abandonar cualquier cosa.....

Ronald Quintero dijo...

Te felicito por tu blog, en realidad muy bueno.