23 octubre 2005

Esperando a Wilma (y no con entusiasmo)


Hablé con mother hace media hora, allá están en Broward a la espera de Wilma que ya se reorganizó y ascendió a categoría 3. Estaban molidos (brother y father) por la instalación de la protección antihuracán de ventanas y puertas de su casa y de la casa de la vecina, una gringa viuda y sexagenaria (como le encanta reseñar a los periódicos) que no está para esos menesteres. Apertrechados con pilas, hielo, agua y comida, olvidé preguntarle si se compró un radiecito de baterías, porque fijo que se les va la luz como todas las veces anteriores.
El año pasado ya recibieron cerca el impacto de Frances que pasó por su casa sin pena ni gloria, a Dios gracias; esa vez estaba mi mayora con sus mumuelos pasándose el verano y asumió ese huracán con toda la intensidad de una niñita de 9 años, supongo que no lo olvidará en muchos años.
Solo nos queda esperar que sea leve, mientras trataré de llamarlos seguido para ver cómo va la cosa.
Sister que está abajo en Miami, lo sentirá más suave, por ellos no temo.
Dios me los bendiga, folks.
Abur.-

19 octubre 2005

Resultados

No había reseñado aquí mi actuación en el final nacional de Scrabble en el que participé hace casi dos semanas. Luego de dos intensos días de competencia en los cuales jugamos 12 partidas, mi posición final ganando 6, fue en el puesto 23 de un total de 48 jugadores, logrando un promedio por partida de 432 ptos. Al completar mis 17 partidas oficiales obtuve un ELO de 2138, bastante satisfactorio, por cierto. De ahora en adelante éste número se verá afectado cada vez que me enfrente oficialmente y según el escalafón de mis oponentes.
Al final del primer día, jugando la última partida (que por suerte gané) se me vino todo el cansancio encima. Para ese momento ya llevábamos más de 8 horas concentrados y el agotamiento pega, me dolía la cabeza, la espalda y las piernas....solo pensaba en acostarme.
Al día siguiente me sentía con menos presión y más descansada. Lo mejor de todo fue conocer un gentío chévere y amistoso.
Espero repetir en la final el año que viene y ya estoy convenciendo (y entrenando) al pichurro para que juegue formalmente también. De ahora en adelante nos toca aprender a competir: manejar el reloj, las consultas, el riesgo, medir al oponente.

Mención aparte y especialísima para mi pichurro que se encargó de toda la logística: manejo ida y vuelta, cuidado y diversión de las niñitas, y sobre todo hacerle porras a la jugadora. ¡Gracias infinitas, mi amor!!

17 octubre 2005

Me pregunto


¿Por qué escribo? ¿para quién? ¿qué escribo?

Después de cavilar un rato sobre estas tres simples preguntas se me presentó con claridad la respuesta.
No había que buscarle la quinta pata al gato, escribo porque me gusta expresarme así sea en un monólogo frente al espejo o tecleando pensamientos. Porque sé (y confío) que éstas letras serán leídas un día por mis hijas, que a través de ellas me conocerán un poco mejor.
Porque hay cosas, sentimientos que tal vez nunca se conversan pero que ahí están o sucedieron y que si no las contamos por re o por fa, las estoy escribiendo para no olvidarlas.
Una vez alguien a quien leía acabó con su blog, lo cerró, lo desapareció y eso me causó una sensación de pérdida rarísima y hasta me resultaba casi incomprensible como ese alguien quería eliminar sus emociones plasmadas en letras, porque esta persona escribía sus sentimientos, sus pensamientos. Yo creo que no soy capaz y además no quiero desaparacer éstas frases, existen como existen mis acciones, mis pensamientos.
¿Que de repente otros no nos captan? es muy posible. Cuando le escribes a tu corazón, solo te entiende él.
Me encantará, dentro de quien sabe cuantos años, releerme, redescubrirme, burlarle quizá de mi misma o volver a secar una lágrima escapada al recordar algún episodio de mi vida.
Aunque suene petulante éste journal es un legado a mi descendencia, va sin condimento, solo aderezado con mi alma.
Abur.-
PD a mi misma: recordar escribir más seguido

06 octubre 2005

Movilización


Volvemos otra vez a coger carretera, esta vez para asistir a mi torneo de Scrabble. Ruta: Maracaibo, Barquisimeto, Morón, (posible parada a dormir en Valencia) Maracay y Caracas destino final. Vamos los cuatro, pues su papá no "pudo" quedarse con las niñitas estos días, ellas fascinadas por el plan y yo contenta de tenerlas conmigo aunque falten unos días al colegio.

Este viajecito me genera una especie de ansiedad, por ejemplo: qué carajo tengo yo que estar movilizando a toda la familia porque voy a un torneo de Scrabble? será todos los años la misma cosa? en fin....mejor me dispongo a hacer las maleticas y dejo de pensar tonterías, que entonces se me aguan las ganas de ir.

Abur.-